- Iniciativa crear mecanismos por la vía civil para garantizar que personas tengan herramientas suficientes y efectivas para la defensa frente al cobro de intereses usureros.
El diputado Welmer Ramos presentó a la corriente legislativa un proyecto de ley para la protección contra el cobro usurero. La iniciativa busca dotar de herramientas eficaces a las personas deudoras, mediante la vía civil, para protegerse de los cobros excesivos.
El legislador indicó que, a pesar de los avances logrados con la Ley de Usura, quedaron algunos vacíos de aplicabilidad en la vía civil, que es necesario solventar. Un deudor no puede alegar ante el juez que se le está cobrando una tasa de interés de usura, salvo que acuda a la vía penal o bien, a un proceso civil ordinario para declarar la nulidad del contrato de crédito cuando existen vicios en el contenido esencial. Ambas opciones son caras y lentas, por lo que no ofrecen justicia pronta a las personas.
Tampoco existe en Costa Rica una vía ágil para que un deudor pueda peticionar que se revise la tasa de interés pactada, para que se dilucide si esta se ajusta a la tasa máxima establecida por el BCCR y que, a partir de ahí, se recalcule a la baja la tasa de interés.
Por eso, la iniciativa del diputado Ramos ofrece dos condiciones:
En primer lugar, crea la posibilidad de recurrir, dentro de un proceso sumario, para que se revise si la tasa de interés se adecúa al límite establecido por la Ley contra la Usura crediticia, así como cualquier otra condición abusiva que le pueda estar siendo aplicada.
En segundo lugar, modifica el Código Procesal Civil para incorporar un mecanismo de defensa específico, para que el deudor sometido a proceso monitorio dinerario pueda solicitar al juez las mismas valoraciones sobre la tasa de interés que en la Ley de Usura.
“Este proyecto es de trascendental importancia, ya que actualmente hay más de 800 mil casos de cobros judiciales en los tribunales. Es necesario crear mecanismos para liberar a las personas de deudas por intereses de usura, ya que esto provoca la pérdida de sus bienes, familia, salud e incluso hasta de su vida, dado los casos en que se han reportado suicidios debido al acecho de deudas impagables”, indicó Welmer Ramos.